El garito se viene abajo
01/03/2010   Lecturas: 7.392

Catilina

Envía Zapatero a sus azacanes a mentir por Europa –en Estados Unidos prefiere mentir él personalmente-, desconcertado al ver que en el exterior parecen entenderle mejor que nosotros, los españoles. Así es como el Presidente de turno de la Unión Europea ordena que toda una vicepresidencia se traslade a Londres para justificarse ¡ante un diario! -el Financial Times, aquel diario económico que, tras la irrupción de Zapatero en La Moncloa, creía ver en sus ojos el azul de los mares del Sur-.

Como la justificación es imposible –tan mal nos van las cosas económicamente- hacen lo mismo que en España: falsifican los datos que presentan. No es nuevo, se lo vimos hacer al predecesor de la actual ministra de Economía en un debate preelectoral frente a su adversario, Manuel Pizarro. A tal extremo llegan que muestran índices económicos positivos de la época de Aznar como pertenecientes a la etapa socialista de Felipe González. Nuestra deuda, concluye el diario económico días después, no es comparable a la de Grecia. Por supuesto que no lo es: es mucho mayor. La razón de que el diario se equivoque es que Elena Salgado y Campa (que no es la Campanario, sino el segundo de Economía) les han engañado: solamente han presentado las cifras de la deuda del Estado central, pero no le han incorporado la de las autonomías y entidades locales, aunque todo ello sea deuda pública. Sumadas esas tres cantidades, la deuda española es elevadísima. Pero subsiste un problema añadido: nuestro endeudamiento privado está entre los mayores del Mundo. El sumatorio de todos estos factores arroja un resultado -la deuda española total y real- muy preocupante (la tercera del Mundo, por detrás de Gran Bretaña, que es la segunda y de los estados Unidos, la primera)

Escalofriante porque las cifras de actividad españolas son una broma comparadas con la americana o la británica: el paro en Gran Bretaña se colocaba el año pasado en menos de la tercera parte del español y su producto interior bruto crecerá este año un 0,2% mientras la España zapaterina continua en recesión por tercer año consecutivo, esto es, estamos a la entrada del túnel de la depresión. De Estados Unidos no hablo porque sus capacidades nacionales en cualquier sentido lo colocan en una órbita económica y productiva que España ni se plantea.

Brujulea por las televisiones un economista del partido socialista llamado Miguel Carmona que mueve a lástima. Se trata de uno de esos seres del PSOE que lleva varios años seguidos explicándonos por qué es acertada la estrategia económica del Gobierno (la única posible, vuelven a repetir el leit motif de Felipe González) mientras la realidad les desmiente cada día y arruina con miseria y paro la vida de los españoles. Le traigo a colación porque hace algunos meses le oí justificar los altos índices de inflación que dañaban la economía socialista gritando ¡la inflacción la padece España desde Don Rodrigo! Quién iría a decir que los socialistas de Carmona y Zapatero iban a dejar España que no la conociera ¡ni Don Rodrigo! Con ellos, hasta la inflación ha dejado de ser un problema. Tal es la emaciación nacional.

Como sigamos así vamos a acabar comiendo mierda –comenta el optimista- ¿Y crees que habrá mierda para todos? Responde el pesimista. Les hablo de la España socialista de Rodríguez Zapatero Zetapé, ése que no hace mucho decía La crisis es una falacia, puro catastrofismo Concedo que Zapatero no sea único responsable de la crisis; simplemente es culpable de haberla negado continuamente (aún hoy siguen hablando de ajuste) Hoy vivimos las consecuencias de los actos de ayer, pero el drama sigue.